jueves, 19 de noviembre de 2015

El Invento Más Poderoso Descubierto Por El Hombre: LA EXCUSA!!!


Todos en algún momento de nuestra vida nos hemos visto expuestos a ciertos acontecimientos los cuales nos llevan a expresar una excusa para una u otra cosa.
Desde el principio de la vida humana en el huerto del Edén hemos podido ver a un Adán y a una Eva exponiendo sus excusas ante las interrogantes que el mismo Dios Eterno les hacia.


Fue ahí en donde por primera vez en la historia nacía lo que ahora llamamos como
“EXCUSA”


la cual muchos de nosotros utilizamos diariamente
en muchos ámbitos
y hemos llegado al punto
de no solo
excusarnos
de cosas seculares sino también de cosas espirituales.




Génesis 3: 9-10
“Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo:
¿Dónde estás tú?
Y él respondió:
Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí”.




Las excusas tienen la patente de Adán,
el primer hombre sobre la faz de la tierra tuvo que recurrir a la ahora tan famosa
“excusa”


¿Cuántos de nosotros en momento determinado
hemos tenido que recurrir a ella?




Las excusas son tan unidas dentro de la humanidad,
porque ellos la inventaron.


Cuando Dios le pregunta a Adán, puso como excusa:
“La mujer que me diste”
Y esa es una de las excusas que siguen poniendo hasta hoy.


Pero las mujeres también se excusan,
cuando Dios le dijo a Eva, qué hiciste, ella dijo:
“la serpiente fue la que me llevó a hacerlo…”


Y hasta hoy las mujeres le echan la culpa
al diablo en todo momento.




¿QUÉ SIGNIFICA EXCUSA?


1- Motivo o pretexto que se invoca para eludir una obligación.


2- argumento que se da para justificar algo.


3- pretexto para eludir una obligación.










¿Recuerdan al famoso personaje de
"El chavo del 8"?


CON LA FAMOSA FRACE:
"Es que, fue sin querer queriendo"




Cada vez que hacia una travesura siempre buscaba una excusa para evadir su responsabilidad o la falta de ella.


Igualmente hay muchos por allí que en lugar de enfrentar
su responsabilidad la evaden con un,
"Es que".


Razón por la cual muchas personas no disfrutan la vida y se pierde algunas de las bendiciones que Dios quiere darles o se sienten mal consigo mismas es porque no terminan lo que comienzan. Y es por eso que nunca llegan a experimentar el gozo de una meta alcanzada o de un deseo cumplido porque no prosiguen a pesar de los desafíos que surgen.


La mayoría de creyentes no querrán decir:
ABANDONO.
Así que ponen excusas o culpan del fracaso
a alguien o algo.




TOMA EN CUENTA ESTE SABIO CONSEJO:


EL ÉXITO TIENE UN CAMINO A SEGUIR, EL QUE QUIERE EL ÉXITO SIN RECORRER ESE CAMINO, SOLO LLEGARA A UN LADO, Y NUNCA A LA META DEL ÉXITO








Cada persona tiene una "bolsa de excusas" ,
es un pequeño accesorio invisible que llevan con ellos todo el tiempo, entonces, cuando se da algo que parece difícil, que los desafía o que les da más de lo que quieren afrontar, sacan una excusa, como:


-Eso es demasiado duro.
-No tengo suficiente tiempo.
-No había planeado eso hoy.
-No puedo ver cómo eso funcionará.
-No tengo ganas de hacerlo.
-Tengo demasiadas cosas en mi vida en este momento.
-No sé cómo hacer eso.
-Nunca he hecho eso. Ni siquiera conozco a nadie que haya hecho eso alguna vez.
-No tengo a nadie que me ayude.
-No tengo a nadie que me apoye.
-No tengo a nadie que me instruya.
-No tengo suficiente dinero.
-Tengo miedo.












Las excusas comunes dentro de nuestro circulo:


Hoy te insto a que tires esa bolsa de excusas,
ve y consigue una bolsa de
¡PUEDO HACERLO!


Llénala de razones bíblicas y llenas de fe,
porque las puedes hacer todo lo que necesitas hacer,
es tiempo de dejar las excusas y comenzar a hacer lo que Dios te esté diciendo que hagas, no veas tus debilidades, porque la fortaleza de Dios te perfeccionará en tu debilidad, mediante tu debilidad e incapacidad es como Dios muestra su fortaleza, Dios realmente utiliza personas a propósito que absolutamente no pueden hacer lo que Él les está pidiendo a menos que le permitan a Él que lo haga por medio de ellas. No necesitas capacidad,
necesitas:
DISPONIBILIDAD y una
ACTITUD de
¡PUEDO HACERLO!




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miércoles, 7 de octubre de 2015

Las Maravillas De Sus Bendiciones!




Proverbios 10:22
“La bendición de Jehová es la que enriquece, Y no añade tristeza con ella”.



La bendición del Señor enriquece y no añade tristeza con ella. 
El Señor desea que disfrutemos aquí en la tierra de una bendición que no podemos contener,
 que supere nuestras expectativas, y que sea sobreabundante. 

Él quiere que como hijos, sepamos 
que su bendición nos trae paz y nos trae gozo; 
Dios nos bendice cuando nos engrandece
 y nos colma de bienes, cuando nos hace prosperar. 

La bendición más grande que Dios nos puede dar es la salvación, 
es poder disfrutar de esa vida eterna 
cuando partamos a la eternidad, 
pero también de disfrutar de ese cielo aquí en la tierra. 

Debemos aprender cómo provocar esa bendición de Dios incontenible aquí en la tierra. 
¿Qué provoca que Dios te bendiga?


BÚSQUEDA SINCERA

En Lucas 8:46 
nos habla de una mujer que llevaba 
12 años con una menstruación constante. 
Había gastado todo su dinero en médicos
 para buscar soluciones, pero no lo encontraba. 
Ella se encontraba cansada. 
Un día ella vio a Jesús entre la multitud, 
y ella se dijo para sí misma: 
yo debo buscar sinceramente a Jesús y provocar mi bendición.

A ella no le importó lo que la gente pudiera pensar de ella,
 y con determinación y perseverancia logró llegar
 hasta donde estaba Jesús, y provocó su milagro tocando su manto, y en ese momento fue sana. 

El manto de Jesús representa autoridad, 
ella buscaba más que el milagro, era someterse 
a la autoridad del Señor, 
buscaba no solo el milagro momentáneo, 
sino consagrarse para Él, 
y eso es lo que hace la diferencia. 

Cuando buscas sinceramente a Dios, 
no es solamente por el milagro del momento, 
sino para consagrar tú vida a Él, 
osea que Jesús gobierne tu vida, 
dejando que Él sea quien maneje tu vida. 
Esta mujer, al tocar el manto,
 hizo que Jesús sintiera en ese momento
 que poder había salido de Él.

Jesús sabía que alguien lo había tocado con fe, 
y esa fe fue la que la salvó a ella. 
Tú debes buscar sinceramente esa bendición de Dios.

ALMA AGRADECIDA

Aquel que sabe que debe ser agradecido con Dios, 
jamás olvidará las bendiciones que Dios te da.

En Lucas 17:11 
encontramos a Jesús yendo para Jerusalén, 
y se encontró a diez leprosos, 
y ellos le pidieron misericordia a Jesús para ser sanos, 
y Jesús les mandó a que se presentaran con los sacerdotes,
 y en el camino fueron sanos, 
pero uno de ellos al verse limpio, 
se devolvió donde Jesús a darle gracias. 
Solo uno de diez. Jesús al verlo solo, 
y al no ver a los otros nueve, 
lo bendijo con la salvación. 

Muchas veces olvidamos rápidamente
 lo que Dios hace por nosotros. 
Si tenemos a Dios, tenemos todo.

 Debemos amar a Dios con gratitud, 
ya que la gratitud es lo único que nos mantiene fiel a Él. 
Con un alma agradecida provocamos la bendición de Dios.

CORAZÓN GENEROSO

En Proverbios 11:25 
dice que el alma generosa será prosperada, 
si tienes un corazón amplio para Dios, 
Él será fiel contigo para bendecirte y darte más de lo que esperas. 

Cuando seas generoso, 
y vayas más allá de lo que se esperas o de lo que se te obliga,
 eso provoca la bendición incontenible de Dios sobre tu vida.

 El amor de Dios es sin medidas,
 debes buscarlo mucho más en oración y debemos ir más allá en conocer la Palabra. 
Debemos ir más allá en nuestro servicio y consagración a Dios 
e ir más allá en nuestro trato a nuestros padres, 
a nuestra pareja y al prójimo que nos rodea.

Apliquemos estos principios, 
y provoquemos la bendición de Dios, 
y hagamos que Dios suspire de amor
 por nuestros actos hacia Él.




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EL ORGULLO, Un Enemigo De Nuestro Matrimonio!




El egoísmo es una actitud destructora de matrimonios!

Es el excesivo aprecio que tiene una persona por sí mismo, y que le hace atender desmedidamente su propio interés,
 sin preocuparse mucho del de los demás.

 Está relacionado con la ambición, la codicia,
 el individualismo, el egocentrismo y el irrespeto.

Es una enfermedad emocional degenerativa que siempre
 trata de sacar ventaja para sí mismo, 
sin importarle mucho la necesidad o el deseo de otras personas.

Por ejemplo: 
los esposos que no escuchan a su cónyuge con la debida atención, evidencian una actitud egoísta. O los esposos que no respetan el punto de vista de su cónyuge aunque esté equivocado(a), manifiestan una actitud egoísta. 

Hay muchos cónyuges que no quieren compartir con la familia de su esposo(a). Muchos matrimonios tienen problemas en el área de las finanzas porque siempre quieren manejar el dinero a su manera sin tomar en cuenta la opinión de su cónyuge. En las relaciones sexuales también se puede manifestar el egoísmo cuando se interesan más por el bienestar propio que el del cónyuge.

Lo más increíble, es que tendemos a ver las manifestaciones de egoísmo en nuestro cónyuge con mucha facilidad, pero nos cuesta verlas en nosotros mismos(as). Reclamamos 
“nuestros derechos” 
pero rara vez tomamos en cuenta los 
“derechos”
 o necesidades y deseos de nuestro cónyuge. 
Muchas veces juzgamos y acusamos sin darnos cuenta
 que nosotros también hacemos lo mismo muchas veces.

Toda manifestación de egoísmo en el matrimonio generalmente provoca discusiones que van a lesionar seriamente
 la relación de la pareja. 

La actitud egoísta hace sentir al otro que no le importa su bienestar y por lo tanto no le interesa la relación. 
El dolor que provoca esa sensación hace que las parejas reclamen atención y discutan fuertemente, lo cual fácilmente les conduce a herirse emocionalmente. 
Hay otras parejas que no discuten, 
no piden la atención pero entonces se vuelven indiferentes.

¿COMO CONTROLAMOS NUESTRA ACTITUD EGOÍSTA?

 Lo primero es reconocer que hemos actuado egoístamente en muchas ocasiones, lastimando a nuestra pareja. 

Segundo, debemos asumir una actitud de humildad, tolerancia y paciencia, y debemos tomar la decisión y esforzarnos por poner atención y tratar de comprender el punto de vista de nuestro cónyuge, dedicando más tiempo a pensar en sus necesidades, deseos y gustos. Hable con su cónyuge y reconozca su actitud egoísta antes de pedirle que vea las de el(ella).

La regla de oro:
 “Hacer con los demás como te gustaría que hicieran contigo” 

Mateo 7:12. 
Esta regla de relaciones humanas nos habla de tratar a los demás como nos gustaría que nos trataran a nosotros en cualquier situación.
 “Todo lo que el hombre sembrare eso también segará”. 
Gálatas 6:7 

Si sembramos en nuestra pareja cariño,
 atención, respeto, 
amor, buena voluntad, consideración, apoyo, etc.; 
vamos a recibir lo mismo y más. El mejor antídoto contra el egoísmo es el amor, porque amar es dar, 
servir y atender el bienestar de los otros.

Toma la decisión hoy mismo de pedirle perdón a tu cónyuge
 por tu actitud egoísta y comienza a trabajar en un nuevo hábito 
que elimine el egoísmo de tu vida 
y te permita atender las necesidades
 y deseos de tu cónyuge.

Tú matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso 
que Dios te ha dado.

 CUÍDALO!!!



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lunes, 14 de septiembre de 2015

El Estrés Como Manejarla!



¿Qué es el Estrés? 

Todos hemos sentido estrés alguna vez, ya sea por el trabajo, la escuela, las deudas, la familia, etc. Por lo que es algo que nos acompaña en nuestra vida diaria, que aunque a veces no lo notemos, siempre está presente.

El estrés podría ser la principal causa del problema. Muchos de nosotros tenemos altos niveles de estrés crónico, ya sea por el trabajo, por problemas sentimentales o por una lista de obligaciones más larga que el cuello de una jirafa.

¿Cómo se refleja el estrés en tu cuerpo?

Entendido el estrés como un factor nocivo que afecta los cambios emocionales, los especialistas advierten que puede producir una mayor intensidad en nuestras tareas, y por lo tanto, puede potenciar las capacidades y probabilidades de éxito en distintos aspectos. Lo que hoy conocemos como distrés.

Por el contrario, advierten que también puede perjudicar la salud, relaciones personales, laborales y rendimiento general.


Jesucristo constantemente estuvo bajo presión. Sufrió presiones de tiempo; rara vez gozó de privacidad; siempre lo interrumpían; las personas, en repetidas ocasiones, lo malinterpretaron, lo criticaron y lo ridiculizaron. Experimentó tal clase de estrés que hubiera hecho claudicar a cualquiera de nosotros.

No obstante, al considerar la vida de Cristo, rápidamente descubrimos que permaneció en paz aun bajo presión. Nunca estuvo en apuros. Siempre estaba calmado. Poseía una tranquilidad en su vida que le permitía lidiar con el exceso de estrés.

 ¿Cómo logró hacer esto con tanto éxito? 
Él fundamentó su vida sobre las bases firmes del manejo del estrés. 

Si lográramos entender y aplicar estos principios a nuestras vidas, podríamos experimentar menos estrés y más tranquilidad emocional.

Ahora quiere que prestes mucha atención a esto:

El estrés implica una reacción física y emocional compleja, en la que se identifican tres fases:

1. Se da una reacción de alarma en respuesta a un factor de tensión que activa el sistema nervioso autónomo.

2. La fase de resistencia ocurre mientras el cuerpo se aclimata y ajusta al factor de estrés.

3. La fase de fatiga: la tensión persiste por mucho tiempo y se combina con otros factores que pueden llevar a la enfermedad.


Las investigaciones han demostrado que el estrés excesivo es uno de los factores que contribuyen al desarrollo de muchos males, tanto físicos como emocionales, por lo que es muy ocurrente que suceda una somatización, en consecuencia con la falta de una capacidad adaptativa a dichos cambios.

Son muchas las enfermedades psicosomáticas producidas por el estrés o desencadenadas o agravadas por el mismo. Sin embargo, es indudable su acción sobre enfermedades digestivas como úlceras, diarreas y estreñimiento; nutricionales y metabólicas; trastornos articulares y musculares; sexuales y ginecológicos; además de ser un agente desencadenante de trastornos psíquicos, lo cual lleva a la depresión.

Cuando el estrés agudo se presenta, se llega a una respuesta en la que se pueden producir úlceras hemorrágicas de estómago, así como problemas cardiovasculares. Mientras que en personas con factores de riesgo altos, puede incluso provocar un infarto.

Todos estos padecimientos suelen avanzar de manera silenciosa, pues quien lo padece, somatiza de diversas maneras y en diferentes áreas del cuerpo de acuerdo a sus propias características. Muchas veces, sin que se lleguen a dar cuenta, son síntomas o factores del estrés.


CONSEJOS PARA PRACTICARLOS Y APLICARLOS A NUESTRA VIDA:

1. Identifícate: Conoce quién eres

Jesús declaró: «Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida» (Juan8:12). «Yo soy la puerta» (10:9); «Yo soy el camino, la verdad, y la vida» (14:6); «Yo soy el buen pastor» (10:11); «Yo soy el Hijo de Dios» (10:36). ¡Cristo sabía quién era!

El primer principio para controlar el estrés en tu vida es éste: Conoce quién eres. Este es el principio de la identidad. Jesús dijo: «Yo sé quién soy. Yo mismo me testifico». Esto es de suma importancia en el manejo del estrés porque si no sabes quién eres, otro tal vez te lo dirá, desde su propia perspectiva. Si ignoras tu identidad, permitirás que otros te manipulen y presionen para que seas alguien que no eres.

Mucho del estrés que experimentamos en la vida viene como resultado de portar una careta, de no ser genuinos con los demás, de vivir una vida doble o de aparentar ser alguien que en verdad no somos. La inseguridad siempre ocasiona presión en nuestras vidas, y cuando estamos inseguros nos sentimos obligados a actuar y a adaptarnos. Establecemos estándares irreales para nuestras vidas y a pesar de que luchemos, luchemos y luchemos, nos quedamos cortos. Naturalmente, la tensión y la presión son el resultado.

La primera manera de controlar el estrés en mi vida es adquirir un equilibrio interno en cuanto a lo que soy. Y sé quien soy cuando sé a quién pertenezco. Soy hijo de Dios. No fui puesto en la tierra por accidente, sino con un propósito. Dios me ama profundamente. 

Soy acepto ante Dios. Él tiene un plan para mi vida, y debido a que me creó, soy de mucho valor.

Y como él lo puso aquí, eres significativo. Para poder lidiar con el estrés, necesitas saber quién eres. Y hasta que logre controlar este asunto, la inseguridad te va a presionar.

2. Dedícate: conoce a quién tratas de agradar

El segundo principio del manejo del estrés en la vida de Cristo se halla en Juan 5:30: «Yo no puedo hacer nada por mi propia cuenta; juzgo sólo según lo que oigo, y mi juicio es justo, pues no busco hacer mi propia voluntad sino cumplir la voluntad del que me envió».

Este es el principio: Conoce a quién tratas de agradar. Entiende que no puedes agradar a todo el mundo, porque en tanto lo logres con un grupo, otro se disgustará contigo. 

¡Ni aun Dios se dedica a agradar a todo el mundo, de modo que es vano procurar hacer algo que ni siquiera él hace!
Jesús sabía a quién intentaba agradar; para él eso era un asunto contundente: «Yo voy a agradar a Dios Padre». 
Y el Padre respondió: «Éste es mi hijo amado; estoy muy complacido con él» (Mateo 3:17).

Cuando uno no conoce a quién está tratando de agradar, 
se rinde ante tres cosas: 
la crítica (porque le afecta lo que otros piensen de su persona),
 la rivalidad (porque le preocupa que otro le lleve la delantera), 
y el conflicto 
(porque se siente amenazado cuando alguien discrepa de uno).

Si busco primeramente el reino de Dios y su justicia, entonces todas las demás cosas necesarias de la vida me serán añadidas (Mateo 6:33). Esto significa que si me dedico a agradar a Dios, eso simplificará mi vida. Siempre haré lo correcto, aquello que agrade a Dios, a pesar de lo que piensen los demás.

Nos encanta atribuirles a otros, la causa de nuestro estrés: «Tú me obligaste…», «Debo…» «Tengo que…» En realidad, hay pocas cosas en la vida (sin mencionar el empleo) que tenemos que hacer. Cuando decimos: «Tengo que hacerlo», «Debo hacerlo», «Necesito hacerlo», realmente estamos diciendo «Escojo hacerlo, porque no deseo pagar las consecuencias», difícilmente podrá alguien obligarnos a hacer algo, de manera que no podemos culpar a otro de nuestro estrés. Cuando nos encontramos bajo presión, decidimos permitir que otros nos presionen. No somos víctimas a menos que permitamos que las exigencias de los demás nos presionen.

3. Organízate: conoce lo que tratas de lograr

Aquí tenemos el tercer principio de Jesucristo para lidiar con el estrés: «Aunque yo sea mi propio testigo mi testimonio… es válido, porque sé de donde he venido y a dónde voy» (Juan 8:14). El principio es este: Conoce lo que tratas de lograr. Cristo declaró: «Sé de donde he venido y a dónde voy». A menos que planifiques tu vida, y fijes prioridades, experimentarás la presión de lo que otros consideren importante.

Todos los días vives de acuerdo a las prioridades o a las presiones. No hay otra opción. O decides lo que es importante para tu vida o permitirás que otros te lo dicten. Estableces las prioridades o vives con las presiones.

Es muy fácil actuar bajo la tiranía de la urgencia, llegar al final del día y reflexionar: «¿Habré logrado algo realmente? Gasté mucha energía e hice muchas cosas pero, ¿logré hacer algo importante?». Estar ocupado no necesariamente resulta productivo. Es posible encontrarse dando vueltas en el mismo lugar sin lograr nada.

La preparación te permite sentirte calmado. Dicho de otra manera, «prepararse le evita la presión mientras que la desidia le da lugar a la presión». Organizarse y prepararse adecuadamente le reduce el estrés porque estás consciente de lo que eres, a quién trata de agradar y qué es lo que deseas lograr como meta. Fijarte objetivos claros simplifica la vida en gran manera. 

Dedica unos minutos para hablar con Dios diariamente. Consulta tu agenda del día y decide: 

¿Realmente querré ocupar un día de mi vida de esta manera? 

¿Estaré dispuesto a cambiar estas veinticuatro horas de mi vida en pro de estas actividades?


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lunes, 10 de agosto de 2015

Prioridades En El Reino!




“Un hombre que manejando un carro BMW  
tuvo un accidente que se fue a un barranco; 
èl saltó a tiempo pero su brazo se quedo
prendido en la puerta. 
El carro se incendió, perdièndose totalmente.

Una persona que pasaba paró para ayudarle y cuando llegó oyó que se lamentaba y decía: “Mi BMW, ay mi BMW..!!” 
La persona le dice pero gracias a Dios
usted està vivo..! 
De pronto la persona ve que al accidentado le hace falta un
brazo que se le había desgarrado desde el hombro y le dice: 
“Es muy importante que busquemos donde quedó su brazo
 y estoy seguro que un mèdico puede
operarle y ponérselo en su lugar de nuevo”. 
El hombre se da cuenta del brazo
perdido y exclama: 
“Ay mi Rolex.. mi Rolex…!!”

La vida está llena de prioridades.
 Sin lugar a dudas, 
cada uno de nosotros, 
casi de manera inconsciente,
 elegimos de entre el sinnúmero de cosas 
que podríamos hacer, 
las que, a nuestro parecer, son las prioritarias. 

1. Una de las màs grandes presiones hoy es:  
 EL TIEMPO

2. Lo màs valioso para las personas: 
 LAS POSESIONES


3. El tiempo debe de ser bien administrado

PENSAMIENTO: 
“El que sabe cómo administrar un minuto tambièn lo
podrà hacer con toda su vida”

4. PRIORITIZAR:  
 Es hacer primero lo que es nuestro deber.

5. PRIORIDAD:  
Es concentrar todas tus fuerzas en lo màs 
importante y urgente…!

Inicia el texto con el término zetéo (“busquen”), 
significa una búsqueda con
anhelo gozoso y decidido. 
Observe que dice: «primeramente»

Jesús utiliza la palabra griega proton que
se traduce como: 
“primero que todo”, 
“antes que nada”. 



Es un asunto de primacía, de sitial de honor,
 de preponderancia, lo que está por encima de todo
lo demás.
Se trata de una búsqueda prominente, 
que se distinga de cualquier otra
búsqueda, en pos de lo más importante. 
Es una búsqueda que se tiene que
notar a los ojos de Dios,
pero también a los ojos de los demás.
Se trata de una clase de prioridad que provoca que uno abandone,
por el Reino de Dios, todos los tesoros ilusorios (Mateo 6.19-21). 

¿Quién de nosotros no ha puesto en una agenda 
una lista de actividades, 
de entre las cuales, 
jerarquiza unas en los primeros lugares, 
y otras bajo el renglón de
“por si tengo tiempo”? 

Las prioridades, son algo de nuestro día a día. 
Algo que, querámoslo o no,
 forma parte de nuestra vida cotidiana.

La vida fue diseñada para ser sencilla, 
no complicado, y la llave a simplificar la vida es la priorización. 

Identificar la prioridad correcta en la vida 
es la llave a una vida exitosa y cumplida. 

Si nuestras prioridades determinan
la calidad de vida y dictan todas nuestras acciones y conducta, entonces 
es esencial que entendamos e identifiquemos nuestras prioridades. 

La tragedia más grande en la vida 
no siempre será la muerte, pero si la vida sin propósito y con las prioridades equivocadas. 
El error más grande en la vida es de estar ocupado 
pero no efectivo.

El fracaso más grande de la vida es de tener éxito 
pero en la tarea equivocada. 
El éxito en la vida es medido por el uso efectivo de un tiempo.

Colosenses 3:1
Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
Le puede sorprender saber
 que la mayor parte de las personas en el mundo 
son manejadas por las prioridades inexactas 
que ocupan y controlan su entero vivir. 

PENSAMIENTO: 
“Aunque lo urgente sea bueno, esto puede mantenerte fuera
de lo que es CORRECTO” 

Todos queremos tener la certeza de que estamos en la voluntad de Dios y saber que nos está bendiciendo. 
Pero nos hemos preguntado 
¿qué es lo verdaderamente
 importante para Dios?
La respuesta pondrá en evidencia lo que debieran ser nuestras prioridades. 
Tratemos de enfocarnos en estas preguntas para descubrir cuáles son las prioridades nuestras.

• ¿Qué le está robando a Dios el primer lugar en su vida? 
• ¿Qué está agarrando con todas sus fuerzas? 
• Mire su calendario, y vea lo que Ud. mismo a priorizado. 
•¿Cómo estar organizando tu tiempo?

TODOS EN ALGÚN MOMENTO UTILIZAMOS LA EXCUSA: 
NO TENGO TIEMPO!!!



¿Ha reservado tiempo diariamente para estar con Dios?
TIENES UNA RELACIÓN INTIMA CON DIOS?

¿Está guiando a su familia buscando primero la voluntad de Dios?

veamos lo que nos dice la escritura en 
Hebreos 11:24-26  (NTV)
Fue por la fe que Moisés, cuando ya fue adulto, rehusó llamarse hijo de la hija del faraón. 
Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los placeres momentáneos del pecado. Consideró que era mejor sufrir por causa de Cristo que poseer los tesoros de Egipto, pues tenía la mirada puesta en la gran recompensa que recibiría.
Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; 
porque se sostuvo como viendo al Invisible.

No la puso en su tesoro, 
ni en sus títulos, sino en el galardón. 

Hay gente que se equivoca y dice: 
“Yo no quiero mi galardón”. 

¿Cómo no vas a querer lo que Cristo está preparando para ti? 

Cuando pones la mirada en el galardón, 
hasta los tesoros más grandes de este mundo se quedan pequeños.

Tomemos Decisiones
 POR CONVICCIÓN, 
nunca por Emoción
o Conveniencia.

i. Escojamos lo que tiene valor ETERNO
ii. Escojamos LO MEJOR por encima de LO BUENO
iii. Elimine LOS PASATIEMPOS
iv. Actuemos INMEDIATAMENTE

¿CUALES SON LOS BENEFICIOS DE ESTA-BLECER BIEN
NUESTRAS PRIORIDADES?

a. Tareas Cumplidas
b. Responsabilidades concretadas
c. Personas agradadas: Dios, La familia, La iglesia, El vecino
d. Logro de las Metas
e. Crecimiento, Ganancia, Prosperidad..!!
f. “Todas las demàs cosas vendràn por añadidura”

Presta atención a este dato.
ALGUIEN CALCULO COMO SE GASTA LA VIDA 
en una persona que vivirà 70 años:

Durmiendo................ 23 años................ 32.9%
Trabajando.................16 años................ 22.8%
Viendo TV...................8 años.................1.4%
Comiendo................... 6 años................. 8.6%
Viajando..................... 6 años..................8.6%
Divirtièndose...............4.5 años ..............6.5%
Enfermo...................... 4 años..................5.7%
Vistièndose................. 2 años..................8%
Religiosamente........... 0.5 años.............. 0.7%
Total........................... 70 años............... 100%


¿ESTAS GASTANDO O INVIRTIENDO TU VIDA?

 ¿EN QUE ESTAS INVIRTIENDO TU VIDA?

CARLES SWINDOLL 
dijo: 
“La vida es como una moneda, 
la puedes gastar en lo que tù quieras… 
PERO SOLO UNA VEZ..!”


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lunes, 27 de julio de 2015

Actitud de desierto: LA QUEJA !




Números 11:1
Aconteció que el pueblo se quejó a oídos de Jehová; y lo oyó Jehová, y ardió su ira, y se encendió en ellos fuego de Jehová, y consumió uno de los extremos del campamento.


El desierto es un terrible lugar para visitar y un devastador lugar para vivir. A veces vivimos en desiertos emocionales y espirituales sin darnos cuenta. Sentimos la seca y sin vida experiencia pero olvidamos conectarla con lo que realmente 
somos y cómo llegamos allí. 

Son nuestras actitudes las que nos llevan a experiencias de desierto. Las actitudes son importantes,
 no sólo las acciones. 
A Dios le importan tus acciones y tus actitudes.


Consideremos a los hijos de Israel. Salieron
 de Egipto y viajaron hasta el umbral de la Tierra Prometida. 
El viaje les tomó 18 meses y cubrió más de 300 millas. 
Doce de los 18 meses los pasaron 
en la base del Monte Sinaí recibiendo los 10 mandamientos.

Allí estaban a unos pocos pasos de la 
“tierra que fluye leche y miel”
 A unos pasos de entrar a la bendición y al gozo que Dios 
había prometido y Dios les dice que no van a entrar, 
les dice que deben regresar al desierto y quedarse allí hasta que cada uno mayor de 20 años muera.

¡Eso es un movimiento radical!
 Hacer desaparecer una generación entera de tus hijos.
Dios nunca se enoja sin una razón. El no 
“pierde los estribos”
 y después se pregunta qué pasó. 
Este evento se registra en los Salmos, en los Profetas, en los Evangelios y en las Epístolas 
(1 Cor. 10:5, Heb. 3:7-11,15-18 4:1-3)
 por lo que debió tener trascendencia 
y relevancia para nosotros hoy.


Números 13:28-33
 recoge el porqué de esa acción radical de Dios:

a. Los doce espías fueron a la Tierra Prometida y llegaron con las noticias de regreso.

b. Diez regresaron llenos de temor y comenzaron a quejarse acerca de los ejércitos, de los gigantes y de los obstáculos.

c. Josué y Caleb trajeron el informe de la minoría: fe y confianza para conquistar la tierra.

¿Cómo respondió el pueblo? 

Números 14:10
“hablaron de apedrearlos”

¿Qué reflejaba esto? 
Actitudes de falta de fe, una mala actitud.

¿Cómo respondió Dios? 

Números 14:11-12
y Jehová dijo a Moisés: ¿Hasta cuándo me ha de irritar este pueblo? ¿Hasta cuándo no me creerán, 
con todas las señales que he hecho en medio de ellos?
Yo los heriré de mortandad y los destruiré, 
y a ti te pondré sobre gente más grande y más fuerte que ellos.

Un Dios airado se reveló a sus hijos. 
Moisés interviene, pide misericordia,
 que no los haga desaparecer de la faz de la tierra
 y Dios lo escucha.
Pero Dios aún estaba molesto con las actitudes malvadas 
de sus hijos. 

Números 14:26-29
Y Jehová habló a Moisés y a Aarón, diciendo:
¿Hasta cuándo oiré esta depravada multitud que murmura contra mí, las querellas de los hijos de Israel, que de mí se quejan?
Diles: Vivo yo, dice Jehová, que según habéis 
hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros.
En este desierto caerán vuestros cuerpos; todo el número de los que fueron contados de entre vosotros, de veinte años arriba, 
los cuales han murmurado contra mí.

Sólo Josué y Caleb entrarían, 
todos los demás morirían en el desierto. 

Ver. 31-33 
“Ustedes dijeron que yo no los podía hacía entrar, tuvieron miedo de que sus hijos morirían, pues ellos no morirán pero ustedes sí”.

Ver. 34, Vagarían por 40 años, 
1 año por cada día que espiaron la tierra, por cada día sin fe,
 por cada día de queja, por cada día de murmuración
y por cada día de crítica.

Ver. 35 “Quiero dejar bien claro cómo me siento por esto”.
Podemos argumentar, pero Dios es un Dios de gracia,
 compasión y bondad,
 ¿qué puede empujarlo hasta esos extremos?

Las murmuraciones y las quejas de su pueblo. 
Ver. 27

Cuando una palabra suena como es, 
se llama onomatopeya, por ejemplo: 
cuac, cuac, 
miau, miau,
 bla,bla, bla, 
yapi, yapi.

 Cuando nos quejamos eso es lo que escucha Dios, 
un sonido repetitivo y molestoso que 
“lo vuelve loco”

Dios aborrece, detesta esa actitud de contradicción, 
duda y rebelión. No la tolera.

Si decidimos o escogemos el murmurar y el quejarnos como nuestro estilo de vida, ¡entonces de regreso al desierto vamos!
Las malas actitudes hacen de la vida una experiencia seca,
 dura y sin gozo. 
¿Se ha sentido alguna vez así? 
¿Como si su vida está falta del gozo
 y la plenitud que usted desea? 
¿Cómo que se está perdiendo de la clase de vida abundante 
que la Palabra de Dios promete?

Necesita recordar esta verdad: 

Aquellos que escogen la queja y la murmuración 
como sus estilos de vida pasarán sus vidas en el desierto.

Las malas actitudes después de reconocerlas 
hay que reemplazarlas con las actitudes que Dios
 ha diseñado para que puedas vivir en la Tierra Prometida. 

Identificamos una mala actitud y la desechamos, 
identificamos una buena actitud y la adoptamos.

1 Corintios 10:7-8 
No adopten una mala actitud como ellos allá en el desierto o se les estarán uniendo en su peregrinaje.

¿Cómo comenzar a lidiar con mis actitudes?

a. Decidiéndose a creer que las actitudes son críticamente importantes para tu vida

b. Entendiendo que las actitudes son sumamente importantes para Dios

c. Entendiendo que hay serias consecuencias de “desierto” para los que escogen actitudes incorrectas

d. Decidiéndose a cambiar las actitudes que sea necesario cambiar

e. Entendiendo que no puedo cambiar mis actitudes sin la ayuda de Dios

f. Disponiéndome a estudiar la Palabra de Dios para aprender qué actitudes necesitan cambiar y cómo empezar a hacerlo


Todos nos quejamos más de lo que nos gusta admitir. 
Nos quejamos cuando expresamos resentimiento por las circunstancias que están más allá de nuestro control 
y por las cuales no estamos haciendo nada.

El quejarnos no cambia nada, 
sólo satisface nuestra naturaleza pecaminosa.
 El quejarnos libera 

“energía emocional negativa” 

En una manera que provee alivio momentáneo 
de una situación o circunstancia que quizás
 sea frustrante para nosotros.

Quejándose, murmurando, lloriqueando, refunfuñando 
y Dios envió fuego del cielo. 
Escogieron quejarse, 
o sea que escogemos nuestras actitudes. 
Ellas no nos escogen a nosotros, 
Nosotros las escogemos, Nosotros las seleccionamos a ellas.

 ¡Nuestro problema de actitud está frente al espejo!

Actitud quiere decir ‘manera de reaccionar’. 
Actitud significa qué posición y qué reacción tendré frente a distintas situaciones. 

Tenemos actitudes frente al trabajo, frente a las personas, frente a Dios, frente a los problemas. Todos reaccionamos de alguna manera. 
Esto se llama actitud.



Hay personas buenas con malas actitudes, 
porque no comenzaron con una actitud correcta, 
una manera de ser de bendición.
 La mala actitud te costará tu trabajo. 

Hay personas que han perdido su trabajo y no han logrado prosperidad porque encararon los desafíos con una actitud equivocada.


Las actitudes no los podemos adjudicar a nadie, no podemos excusarnos diciendo:
 “es la actitud de mi mamá la que heredé”, 
“es culpa de mi papá que yo sea así”, 
“es mi jefe”, 
“es mi vecino”,
 “son los demás”, 
“son los hermanos de mi iglesia”, 
“son mis circunstancias”.

 Escogemos las actitudes a asumir frente a lo que nos rodea.

Los israelitas tenían buenas razones para no quejarse, tenían más que suficientes razones para estar agradecidos, 
sin embargo, escogieron la actitud de la queja.

¿Se acuerdan del informe de los espías? 
El pueblo escuchó el informe de la mayoría
y el informe de la minoría,
 ¿y qué hicieron? 
Decidieron.

Hemos hablado de actitudes, pero no hemos definido
 lo que son actitudes:

a. Actitudes son patrones de pensamiento.

Desarrollamos una manera de pensar acerca de las cosas , una manera de enfrentar la vida. 

b. Actitudes son patrones de pensamiento que se formaron por un periodo de tiempo largo.

 Los israelitas súbitamente no comenzaron a quejarse 
en el desierto, se quejaron en Egipto mientras hacían ladrillos. Usted dirá: 
¡pero su vida era difícil! 
Sí, pero muchos antes de ellos y después de ellos en circunstancias iguales o peores, han escogido no quejarse.

c. Las malas actitudes son maneras de pensar habituales y dañinas y a veces no nos percatamos que las tenemos.   

Nos acostumbramos a reaccionar de una manera específica que nuestras decisiones se vuelven automáticas y creemos que forman parte de nosotros, lo que no comprendemos es que trágicamente las consecuencias son automáticas también.

Al igual que los israelitas al umbral de la Tierra Prometida, usted y yo podemos estar más cerca de lo que creemos a un cambio dramático y que produzca vida y gozo, usted puede escoger rechazar la queja y confiar en Dios.

Una verdad crucial acerca de la queja es la siguiente:
 Quejarse es un pecado. 
Pecado es errar el blanco, 
es fallar en relación a las justas y santas demandas de Dios.

 Nuestra queja nos puede conducir a enojo,
amargura y aún depresión.
Cuando nos quejamos, escogemos una respuesta que nos daña en vez de hacernos bien. Te dañas, te perjudicas tú primero. 
Dios te ama y no quiere que te hagas daño.

Cuando nos quejamos, herimos a Dios. 
Dios se afecta cuando escucha nuestras 
quejas y ve nuestras actitudes incorrectas, 
¡porque el quejarnos cuestiona la Soberanía de Dios!

Al quejarnos estamos diciendo: 
!Dios, metiste la pata! 
Tuviste una oportunidad de llenar mis expectativas,
 pero no supiste hacerlo, no supiste manejarlo. 
Buen intento, Dios, estuviste cerca pero no lo suficiente.

Al quejarnos, herimos a las personas que nos rodean.

¿Cómo definimos queja?
 Expresar insatisfacción con una circunstancia que no está mal o equivocada y por la cual no estoy haciendo
 nada para enmendar o corregir.

Quejarse es refunfuñar acerca de cosas que no están
 equivocadas o incorrectas.
El no hacer nada por mejorar la situación 
es otro factor del quejarme.
La queja envuelve circunstancias, 
situaciones, la crítica envuelve a personas.

Volvamos a 
Números 11:1
...el pueblo se quejó a oídos de Jehová; y lo oyó Jehová...

Dios escuchó cada palabra de cada quejoso de los hijos de Israel. 
El estaba allí. Allí estaba la nube de día y la columna de fuego de noche. Dios estaba allí…escuchando y ellos lo ignoraron.

Una y otra vez se lee en la Escritura frases como éstas:

a.”antes vivía mejor…”

b.”¿Porqué no podemos tener más de esto?”

c. “¿Y cuándo vamos a tener más de eso?”

d. “¿Porqué no te das cuenta de que yo 
necesito…?” 

e. “Tú sabes…”

A diario escucho estas expresiones:

 ¿Porqué tengo que pasar por esto?, 
¿Porqué tengo que soportar todo esto cuando la vida
 le va tan suave a otros? 
Estoy cansad@, ¿cuándo esto se va a acabar?
¿Porqué mi vida no puede ser más como _________?

Cada vez se esta llenando nuestro ser de quejas
 y esta haciendo que acumulemos grandes cantidades de:
N-E-G-A-T-I-V-I-D-A-D-E-S




Esta contínua queja de:
“bla,bla,bla, esto, aquello”, 
“si yo tuviera,  “por que ellos y no yo, etc.

sube hasta los oídos de Dios y El responde: 

¿Se pueden retirar de Mí con esa queja crónica?

Si usted está vivo, enfrentará alguna medida de adversidad, esto parece sorprenderle a algunos. Tendrá la cantidad correcta de adversidad como para cumplir los propósitos de Dios en sus vidas.

Es nuestra decisión: 
regocijarnos por todas las buenas cosas que Dios ha hecho en nuestras vidas o quejarnos acerca de esa sola cosa, 
cualquiera que ésta sea.

Al quejarnos estamos rechazando la gracia que puede ayudarnos a través de esa situación.
Considera esto: Esa misma adversidad de la cual te quejas frecuentemente es lo que Dios quiere usar para mantener tu corazón cerca de El. En su gracia, permite la adversidad para atraernos cerca de El. 

Lo malo no es la adversidad sino nuestra respuesta a ella. 
¡Es nuestra actitud!


Dios oye nuestra queja y le desagrada. 
Nuestras quejas le rompen el corazón, 
debemos de creerle a Él cuando dice:
que Él estará con nosotros.
Pero si Dios nos hiciera una pregunta a nosotros seria:

¿Se pueden retirar de Mí con esa queja crónica?


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